Irse a dormir: ¡una batalla cotidiana!.
A pesar de ser una necesidad fisiológica, hay muchos motivos para que una criatura no quiera irse a dormir. Los miedos y las pesadillas. No querer separarse de los padres... En cualquier caso, con independencia de la causa que provoque el rechazo, es necesario establecer rutinas que predispongan y ayuden a la separación de los padres y al cierre de las actividades del día.
empatía, relaciones de calidad, emociones, dormir,
-
Idioma:
- Castellano
-
Formato:
Texto
Recurso educativo
Cursos y asignaturas
Competencias
Tipo de recurso
- Texto
Uso del recurso
- Para docente
-
Aún no hay comentarios, ¡comparte tu opinión! Inicia sesión o Únete a Tiching para poder comentar
¿Dónde quieres compartirlo?
¿Quieres copiar el enlace?